EL JARDÍN DE LA CALMA Y EL SILENCIO
Un suave batir de alas
y la Noche misteriosa,
cruzando de puntillas
el puente malva de la Tarde,
se adueña del Jardín
de la Calma y el Silencio.
Cerca de allí,
en la cabaña de palma
junto al estanque dorado,
la joven campesina
eleva sus plegarias
ante el viejo altar
de los dioses
y los antepasados.
El arroz que sembró,
en los campos anegados,
crece hacia el cielo,
poderoso, audaz,
espíritu de la tierra,
que de nuevo
ha germinado.
Todo se torna suave
en la penumbra
y hasta el corazón
que el sauce oculta,
late en su interior
estremecido bajo
la oscura caricia
de la brisa nocturna.
Una mariposa descansa
sobre la rugosa rama
del cerezo nevado.
En sus satinadas alas
va engastando
esmeraldas y rubíes,
reflejos ígneos
de las estrellas,
ecos fulgurantes
de sus lejanos rayos.
En el Jardín del Silencio
la Calma mece
al mundo entre sus brazos,
mientras la rosa roja,
lánguida y agonizante,
ha entregado
a la Luna vigilante
el embrujo de su alma
y su perfume
ensangrentado.
Texto de Stefanie
Un suave batir de alas
y la Noche misteriosa,
cruzando de puntillas
el puente malva de la Tarde,
se adueña del Jardín
de la Calma y el Silencio.
Cerca de allí,
en la cabaña de palma
junto al estanque dorado,
la joven campesina
eleva sus plegarias
ante el viejo altar
de los dioses
y los antepasados.
El arroz que sembró,
en los campos anegados,
crece hacia el cielo,
poderoso, audaz,
espíritu de la tierra,
que de nuevo
ha germinado.
Todo se torna suave
en la penumbra
y hasta el corazón
que el sauce oculta,
late en su interior
estremecido bajo
la oscura caricia
de la brisa nocturna.
Una mariposa descansa
sobre la rugosa rama
del cerezo nevado.
En sus satinadas alas
va engastando
esmeraldas y rubíes,
reflejos ígneos
de las estrellas,
ecos fulgurantes
de sus lejanos rayos.
En el Jardín del Silencio
la Calma mece
al mundo entre sus brazos,
mientras la rosa roja,
lánguida y agonizante,
ha entregado
a la Luna vigilante
el embrujo de su alma
y su perfume
ensangrentado.
Texto de Stefanie
5 comentarios:
Siempre encontrará hermosos poemas de estas páginas.
Les dejo un fuerte abrazo
Sencillamente ¡¡Precioso!! Un saludo muy cordial.
Qué gracia... Entro en tu blog y mira, me encuentro con ese poema que es mío, firmado con mi seudónimo Stefanie.
Me alegra infinito haberlo visto por aquí porque lo has puesto recientemente.
¿Dónde lo has encontrado? Me encantaría saberlo.
Te estoy escribiendo desde mi blog de mi grupo de fotografía, Simplemente Dulcinea, pero tengo tengo dos blogs personales, tanto de textos como de fotos. Al blog de fotos, Reflejos, puedes entrar desde Vida y Sendero :
http://vidaysendero.blogspot.com
Saludos,
Perdona, olvidé firmar con mi nombre real.
Mari Carmen Polo
Saludos, Francisco.
Si amiga da gracia, el poema me lo mando una gran amiga llamada Mari Gil que es de Argentina, no se si la conoces pero ella maneja un Grupo llamado "Por siempre románticos poetas y amigos" y por allí fue que lo obtuve me gusto muchisimo y lo publique en el Blog con su respectivo Seudónimo.
Me gustaría si no es mucho pedir que me envíes otros poemas tuyos y los publicaré en mi blog con mucho gusto.
A mi me alegra muchísimo más que te haya gustado verlo en mi blog.
Estamos a la orden cualquier cosa envíame correos al: almeidam11942@gmail.com
Saludos, Mari
Francisco Almeida
Publicar un comentario