Trágico destino…
Ninfa Duarte
Mujeres sin destino, víctimas del tráfico;
los mercaderes las tarifan como a bestias,
y las venden como mercancía de placer.
… Dios proteja a las mujeres sin patria!
Son ellas las que cambian su identidad por monedas,
las que piden piedad con los ojos llorosos,
las que inducidas al vicio, duermen lejos del hogar.
Mujeres del azar, madres de los muertos que caminan,
hermanas de los tratantes, asesinos de ilusiones,
de los que no escuchan sus clamores de impotencia…
Mujeres mártires, hijas de los propios verdugos,
de los que la injurian, las poseen y las repudian,
de los que la gozan y luego las tiran como chatarras;
mujeres de todos… mujeres de nadie…
si el hombre no las ve llorar por dentro,
…Dios proteja a las mujeres sin patria!
Esa mujer vendida por dinero de vergüenza,
es aquella que amamanta en las veredas
se las ve siempre apurada, empujando la vida
sin conocer una palabra amable… ni el único amor…
Mujer sin coronas, sin herencias ni abolengo,
la que siempre está dispuesta, hasta el último suspiro;
esa mujer ajena, es la misma que te dio el ser,
cocina, lava, plancha… y conchabo de sexo.
Mujer de todos los días y todas las noches;
la que cuenta que en las guerras ella luchó también
y nadie la recuerda prendida al amante o al hermano,
mujer que alimenta, cura, lucha y… ama en silencio;
la que sustenta tu patria y la de ella, inmolándose,
con las heridas de su vientre y los tatuajes
que el destino imprimió en su alma maltratada.
Mujer que corrió detrás de una promesa que no fue,
espejismo pintado que vive más allá de las fronteras,
ilusión que se instaló en su hambre cotidiano,
mujer madre… mujer hermana… mujer coraje…
víctima de la trata y la explotación más vil…
Si el hombre no valora su dación de vida;
… Dios proteja a las mujeres de tan trágico destino!
Ninfa Duarte
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